Harry se aparta de Marina y grita a Liam:
- Vamos Liam, que no llegaremos nunca a casa.
Liam le da un abrazo a Sara y entonces corre hacia Harry y los dos desaparecen por las calles de Londres.
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Sara y Marina fueron
corriendo a sus respectivas habitaciones sin decirse nada de lo que
ha pasado esta noche. Se pusieron el pijama y se durmieron pensando
en la mañana que les esperaba.
En
la habitación de Sara...
La
despertó el sonido de su móvil. Era un mensaje. ¡De Liam!
Buenos
días Sara.
Te
espero en la puerta de tu casa a las 11. Nos lo pasaremos muy bien.
Liam.
Sara
mira el reloj de pared. Son las diez y media. ¡Tan solo tiene media
hora!
Se
levanta corriendo de la cama y va hacia el baño. Se da una ducha
rápida de diez minutos, sale del baño y va hacia el armario. Lo
abre y está diez minutos pensando lo que se va a poner hasta que
encuentra un conjunto perfecto. (Conjunto
para la cita con Liam) Mira el reloj. Faltan diez minutos. Vuelve
a entrar en el baño y se maquilla un poco. Se pone rímel y un poco
de pintalabios. Su móvil vuelve a sonar. Otro mensaje.
Estoy
a bajo esperando.
Liam.
Sara baja corriendo
las escaleras y grita:
- ¡Adios
Marina!
- ¡Adios
Sara!
En
la habitación de Marina...
Le
despierta el sonido de un móvil. Es un mensaje. Se levanta tan
rápido, que hasta se resbala y se cae al suelo. Coge el teléfono y
mira el mensaje.
Te
paso a recoger a les 11:30. No llegues tarde ;)
Harry
Marina
sonríe y mira el reloj. Son las once. Tiene media hora. Entonces se
oye la voz de Sara y la puerta que se abre.
- ¡Adios
Marina!
- ¡Adios
Sara!
Y
cierra la puerta. Marina va hacia la ventana y ve a Liam y a Sara
entrar en una gran limusina negra.
Marina
entra corriendo al baño y se da una ducha muy rápida. Cuando sale
son y veinte. ¡Faltan diez minutos! Por suerte antes de irse a
dormir se preparó la ropa (.Conjunto
para la cita con Harry) Entra en el baño y se hace la raya, se
pone rímel y colorete y brillo de labios.
Harry
le envía un mensaje.
Ya
estoy aquí
Harry
Marina
se asoma por la ventana y ve a Harry de pie con una rosa roja en la
mano. Le sonríe y le saluda con la mano. Marina baja corriendo las
escaleras, tropezando de vez en cuando hasta que llega a la puerta.
Se mira en el espejo y abre la puerta.
Harry
se queda mirando a Marina con los ojos abiertos. Parece que se le
salgan de la cara.